Embalar las cajas con un material mullido
Protección entre cada vaso, plato o copa
Lo fundamental en el embalaje de piezas delicadas es que los objetos no se toquen entre sí. Por ello, es necesario proteger primero cada objeto por separado, dándole vueltas sobre el papel de manila (papel de embalaje) y doblándolo al final sobre el propio objeto. En caso de vasos la parte sobrante se debe girar hacia la parte interior de la copa o vaso.
Concretamente, deberemos extender el papel de embalaje sobre una superficie estable como una mesa. Después pondremos la copa tumbada horizontalmente encima y envolveremos la pieza haciéndola rodar. Las partes sobrantes del papel se deben amoldar a la forma de la pieza, introduciendo la parte de papel en la parte superior y recogiendo la parte inferior sobre la propia pieza.
Una vez tenemos la pieza correctamente protegida con papel de embalaje la introduciremos en la caja poniéndola en su posición vertical. Deberemos rellenar todos los espacios huecos para evitar movimientos durante el transporte, por lo que si al rellenar la caja quedan huecos los deberemos de rellenar con el material disponible.
Por otro lado, si rellenamos la base con objetos y queda mucho espacio disponible en la caja podemos establecer una capa de protección que sirva separación con la siguiente planta de objetos. Para esta separación utilizaremos plástico de burbujas en como mínimo 2 capas.
Esta capa de 2 vueltas de plástico de burbuja serán las encargadas de amortiguar los impactos de los objetos ubicados arriba con los de abajo. Por lo tanto, será muy importante colocarlo de manera diligente y si hace falta poner una tercera capa o incluso una plancha de cartón si la tuviéramos.
Finalmente, debemos repasar todos los huecos que hayan quedado para rellenarlos con material de relleno, plástico de burbujas o incluso con papel de embalaje o en este caso si sería muy práctico utilizar revistas o diarios, ya que cada pieza estará protegida con papel de manila que no tiene tinta y no será posible teñir las piezas contenidas en su interior.
Embalaje de platos y vajilla
En el caso de los platos, las consideraciones son las mismas, pero deberemos tener en cuenta que cada uno de ellos debe colocarse en vertical, no en horizontal. A pesar del primer pensamiento que tenemos todos, no debemos apilar los platos unos sobre otros que sería la posición con la que los llevaríamos a una mesa. Por el contrario, es indispensable ponerlos de lado, en vertical. Esto es debido a que si apilamos todos los platos unos sobre otros, el que está en la parte inferior estaría soportando el peso de todos los demás. Siendo esto así, cualquier pequeño impacto podría desencadenar en la rotura del plato inferior y posteriormente en alguno de los siguientes al tener un apoyo irregular de todo el peso.
Las piezas más frágiles arriba
A la hora de introducirlas en las cajas, colocaremos debajo
las piezas de mayor peso. Por tanto, si en una misma caja empaquetamos vasos y copas,
te aconsejamos que metas primero los vasos y en la parte superior las copas que son más frágiles.
Recuerda que después de colocar todas las piezas dentro de la caja debemos rellenar con papel los espacios libres. Si nos saltamos este paso es muy probable que alguna pieza se rompa ya que un pequeño movimiento supondría en golpes entre las piezas delicadas.
Vídeo ilustrativo
Por último, si lo que desea es obtener asesoramiento por parte de nuestro equipo, le invitamos a contactarnos a través de nuestra página web: https://www.mudanzascontrol.com/contacto/
Un interesante artículo de mis compañeros. Me parece muy interesante para facilitar el embalaje y empaquetado de objetos delicados. ¡Seguid así!
ResponderEliminar